Bendición de animales en Alberic en el día de San Antonio Abad

Martes, 19 de enero de 2016 | e6d.es
• El domingo 17 de enero día de San Antonio Abad Patrón de los animales congregó a muchos vecinos de Alberic con sus mascotas, animales de compañía, jinetes con sus caballos o con carruajes y carros, a las puertas de la Iglesia de San Lorenzo Martir

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A las doce de la mañana se celebró la misa en honor a San Antonio Abad en la Iglesia de San Lorenzo Mártir, repleta de fieles, oficiada por el Párroco de Alberic, Javier Abad. Perros de distintas razas, periquitos, gallos de pelea, ponys, caballos, palomos deportivos, etc. llevados tanto por los más pequeños de casa, como mayores. Después de la bendición se les entregaba panes bendecidos Javier Abad Chismol, Párroco de Alberic, fue bendiciendo a cada uno de los animales que le presentaban. Estaba acompañado por Antonio Carratalá (alcalde) y varios concejales de su equipo de gobierno. Cientos de personas  se congregaron en torno a la Plaza de la Constitución, para presenciar el acto.
Al finalizar la bendición de los animales, hubo una demostración por parte de la Unidad Canina de la Policía Local de Alberic y la colaboración de unidades de otras poblaciones, que ampliaremos en crónica aparte.

San Antonio Abad. Breve historia
Antonio Abad, nació en el pueblo de Comas, cerca de Heracleópolis Magna, en el Bajo Egipto.
Se cuenta que alrededor de los veinte años de edad vendió todas sus posesiones, entregó el dinero a los pobres y se retiró a vivir a una comunidad local haciendo vida ascética, durmiendo en un sepulcro vacío. Luego pasó muchos años ayudando a otros ermitaños a encaminar su vida espiritual en el desierto. Más tarde se fue internando mucho más en él, para vivir en absoluta soledad.
Su fama de hombre santo y austero atrajo a numerosos discípulos, a los que organizó en un grupo de ermitaños junto a Pispir y otro en Arsínoe. Por ello, se le considera el fundador de la tradición monacal cristiana. Sin embargo, y pese al atractivo que su carisma ejercía, nunca optó por la vida en comunidad y se retiró al monte Colzim, cerca del Mar Rojo, en absoluta soledad. Abandonó su retiro en 311 para visitar Alejandría y predicar contra el arrianismo.
Jabalina con sus jabatos ciegos
Se cuenta que en una ocasión se le acercó una jabalina con sus jabatos (que estaban ciegos), en actitud de súplica. Antonio curó la ceguera de los animales y desde entonces la madre no se separó de él y le defendió de cualquier alimaña que se acercara.
Con el tiempo y por la idea de que el cerdo era un animal impuro se hizo costumbre en ocasiones representarlo dominando la impureza y por esto le colocaban el cerdo a sus pies.
Es el patrón de los animales ya que le agradaban mucho y siempre los cuidaba cuando veía alguno herido.
Eduardo Sala, texto y fotos.

 

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