La poesía y la música de Atahualpa Yupanqui entran en la Caja de las Letras

Viernes, 19 de enero de 2018 | e6d.es
• El Instituto Cervantes dedicó un emotivo homenaje al cantor argentino

La Caja de las Letras del Instituto Cervantes guarda desde hoy un nuevo legado que suena a música y pampa argentinas: el recuerdo de Atahualpa Yupanqui (1908-1992), el gran poeta, músico y cantor de aquel país, el pensador que plasmó el sentir de su pueblo en cientos de canciones. Tras la entrega del legado por su hijo Roberto Chavero, también cantautor, se celebró un homenaje al gran folclorista en el que participaron numerosas autoridades argentinas.
En la caja de seguridad número 1466 de la antigua cámara acorazada del Cervantes quedaron guardados a perpetuidad unos documentos manuscritos de Atahualpa Yupanqui, seudónimo de Héctor Roberto Chavero. Se trata de tarjetas postales que don Ata escribía a mano y enviaba a su esposa desde aeropuertos en sus múltiples viajes, en aquellos tiempos en que «no había inmediatez y sí esperas y sueños», explicó su hijo y heredero. Roberto Chavero también depositó un mensaje escrito de la Fundación Atahualpa Yupanqui que él preside y que acaba de cumplir 30 años de existencia.
Este es el legado número 31 que acoge la Caja de las Letras, y el cuarto in memoriam (depositado por familiares o allegados de una personalidad fallecida), después de los pertenecientes a García Márquez, Buero Vallejo y Miguel Hernández.
El homenaje se enmarca en los preparativos del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española que se celebrará en marzo de 2019 en Córdoba (Argentina), tierra adoptiva del cantor en la que reposan sus restos. De ahí que el país sudamericano y toda la provincia de Córdoba se hayan volcado en este doble acto en su recuerdo.
«Hoy ha entrado un poco del viento de la pampa y de los Andes», dijo el director del Instituto Cervantes al recibir el legado. Juan Manuel Bonet repasó la «vida de auténtica novela» de Atahualpa Yupanqui, quien «expresó el alma de su tierra como nadie lo había hecho antes». Fue «el gran cantor de su pueblo, la voz de la Argentina profunda», un gran creador en verso y en prosa cuyas creaciones interpretaron cantantes de la talla de Mercedes Sosa, Violeta Para, Jorge Cafrune, Alberto Cortez, Jairo o Chavela Vargas, entre otros.
 
Un escrito dedicado por Lorca
Roberto Chavero desveló que su padre recibió de manos de Federico García Lorca una servilleta con una frase sobre la amistad que el poeta granadino le dedicó de su puño y letra. La servilleta de papel manuscrita, que alguien se llevó años después, demostró que ambos coincidieron en una cena cuando Yupanqui era aún un niño tímido y amante de la literatura y de la música pese a pertenecer a una familia humilde (su padre era ferrocarrilero).
Aurora Egido, secretaria de la Real Academia Española (coorganizadora junto con el Cervantes de los Congresos Internacionales de la Lengua), dijo que el músico «elevó a lo más alto la canción folclórica», razón por la que está considerado «el más sincero trovador del mundo».
El ministro de Turismo de Argentina, Gustavo Santos, manifestó el orgullo de su país por el reconocimiento universal al cantor y el agradecimiento por el doble homenaje organizado por el Instituto Cervantes. Por su parte, el gobernador de la provincia de Córdoba definió a don Ata como «el papa de nuestra música y de la poesía argentina. Nadie cantó y compuso como él, nadie como él interpretó la poesía y el sentir de un pueblo», añadió Juan Schiaretti, quien declaró su devoción por «el mejor folclorista» de la historia argentina y símbolo del mestizaje.
l emotivo acto, con numeroso público, concluyó con dos canciones: Roberto Chavero tocó a la guitarra «Campesino», compuesta por su padre a ritmo de guajira, y otra canción qué el musicalizó con letra de Yupanqui. La voz de éste, en una grabación en Zúrich a los 84 años de edad, poco antes de su muerte, puso el broche de oro a una sesión que permanecerá en la memoria de muchos de los asistentes.
El Seis Doble | Instituto Cervantes