En la
Australian Bat Clinic, como su propio nombre indica, no tienen el más mínimo reparo en proporcionar todo tipo de cuidados a los pequeños murcielaguitos que se quedan huérfanos. Los que vais a ver en los vídeos son zorros voladores, del género Pteropus, los mayores murciélagos del mundo, con algo más de 1 kg y una envergadura de en torno a 1,5 m. Un animal impresionante.
Los del canal
Wakaleo dicen, al respecto de los murciélagos bebé:
"Cuando la madre muere, a menudo las crías dependen todavía de ella y no sobreviven sin la atención adecuada. Los cuidadores tienen un papel vital no solo en la recuperación de los murciélagos, sino también en su rehabilitación hasta que pueden ser liberados al medio natural (...) Brindar afecto a los murciélagos es una necesidad". Leer noticia completa y ver hilo de debate en
lacienciaesbella.