La sombra de la mafia sobre el Banco Vaticano

Miércoles, 17 de octubre de 2012 | e6d.es
• El dossier secreto incautado podría contener información del crimen organizado
Consta en total de unas 200 páginas. Incluye decenas y decenas de emails, apuntes a mano, páginas de una agenda en la que están señaladas citas, encuentros, reuniones... Según sostiene el Corriere della Sera, hasta podría contener información sobre las cuentas bajo código cifrado que la mafia tendría en el Banco Vaticano. Y datos sobre los depósitos con las jugosas comisiones ilegales pagadas por empresas a algunos importantes funcionarios y políticos italianos.
Hablamos del dossier secreto elaborado por Ettore Gotti Tedeschi, el hombre que hasta su destitución fulminante el pasado 24 de mayo estuvo al frente del Instituto para las Obras Religión, el IOR, más conocido como el Banco Vaticano. El ya 'ex banquero de Dios' reunió toda esa pila de documentos comprometedores para que salieran a la luz en caso de que se cumplieran sus más funestos temores y fuera asesinado. Ahora esa montaña de papeles se encuentra en manos de la Justicia italiana. Y en la Santa Sede cunde el pánico.
En una nota difundida ayer apor la tarde a última hora, el Vaticano reconocía su "sorpresa y preocupación" ante las noticias sobre la incautación por parte de los fiscales italianos del dossier secreto de Gotti Tedeschi. Y no sólo eso: la Santa sede lanzaba una advertencia a los magistrados, expresando su "máxima confianza en que las prerrogativas soberanas reconocidas a las Santa Sede por la legislación internacional sean adecuadamente respetadas" por las autoridades judiciales italianas. Es decir: que no se les ocurra divulagar ni meter las narioces en cuestiones que sólo conciernen al Vaticano.
El dossier secreto elaborado por Gotti Tedeschi parece ser que contiene sobre todo papeles que demostrarían la fuerte oposición con que se habría topado dentro del Vaticano al tratar de imponer trasparencia en el tradicionalmente opaco funcionamiento del Banco de la Santa Sede. Esa institución financiera, que gestina un patrimonio de unos 5.000 millones de euros a través de través de 44.000 cuentas corrientes reservadas a dependientes vaticanos, eclesiásticos y una reducida cantidad de entes privados, se ha visto en numerosas ocasiones salpicada por las sospechas de que podría dedicarse a lavar dinero de muy sucia procedencia.  Leer noticia completa en El Mundo