La fiscalía califica de delito permanente y sin caducidad los casos de niños robados

Miércoles, 26 de diciembre de 2012 | e6d.es
• Los fiscales podrán pedir exhumaciones y pruebas de ADN de niños robados

La Fiscalía General del Estado ha enviado una circular para unificar criterios en la que autoriza a todas las fiscalías ordenar exhumaciones de restos de recién nacidos y practicar pruebas de ADN en las causas de niños robados sin necesidad de autorización judicial, además de poder calificar los hechos de detención ilegal. La circular ha sido emitida con el fin de "unificar los criterios jurídicos en las causas de niños robados para ofrecer una respuesta común que permita investigar el más amplio número de casos, aun los más remotos en el tiempo", según ha informado hoy la Fiscalía General del Estado en un comunicado. La circular subraya que, "a la espera de que los tribunales fijen una línea jurisprudencial consolidada al respecto, considera que el delito de detención ilegal es un delito permanente" y por lo tanto no prescribe "mientras la víctima sea mantenida en la ignorancia de su origen y verdadera identidad, aun cuando ya sea mayor de edad". La intención es dar "la máxima protección posible a las víctimas de estas prácticas" que se produjeron en diferentes hospitales españoles, fundamentalmente entre los años 1950 y 1990. En esa circular, la fiscalía recuerda que para aclarar estos hechos, que "a primera vista revisten trascendencia penal", los fiscales deberán abrir diligencias de investigación "antes de promover la acción de la justicia".
De este modo, se incoará una diligencia por cada hecho denunciado, por lo que se desaconseja "tramitar de forma conjunta una pluralidad de hechos cuando no concurra ningún indicio que los permita considerar conexos". En el seno de esas diligencias, los fiscales están autorizados para ordenar la exhumación de restos de recién nacidos fallecidos, y practicar las pruebas de ADN, sin necesidad de requerir la autorización judicial. Leer noticia completa en elpais.com. Foto: Sor María, imputada por el robo de niños, en una imagen del pasado abril. / Cristóbal Manuel