Nada que decir. Arbitraje difícil del inglés Webb, pero ciertamente muy imparcial. Actuación portentosa de Chile ante una de las máximas potencias mundiales, en su propia cancha. Un 1-1 estremecedor, con el infortunio del autogol de Jara y el empate espectacular de Alexis. Entrega inclaudicable del lesionado Medel y de todo el equipo en general.
En la larga historia de victorias brasileñas ante los nuestros, sin duda mantener la ilusión esta vez en 90 electrizantes minutos y luego en el alargue de los 30, es un progreso evidente, aunque con gusto a poco, porque al margen de las cercanías de triunfo desde el punto penal, por personalidad, juego colectivo, individualidades y ambición, llegamos donde mismo con respecto a los dos últimos mundiales, caer ante Brasil en octavos.
Era cierto entonces que las grandes opciones las perdimos en el sorteo de este Mundial, no solamente porque nos dejó en el mismo grupo de holandeses y españoles, sino porque si superábamos la fase inicial como segundos, los brasileños se nos aparecían en el camino una vez más. No vale la pena en el marco de la decepción de los chilenos, recorrer más en detalle las contingencias del partido. Qué cerca estuvimos, pero quedamos como otras veces en el calvario del "casi". * Esteban Lob es un comentarista de fútbol chileno que colabora en el apartado temático “Clan de fútbol” de El Seis Doble.
* Esteban Lob es autor del blog “Esteban Blog”