Más de 500 niños participan este año en las diversas escuelas de verano que promueve el Ayuntamiento de Algemesí a través de las concejalías de Educación, Bienestar Social y Deportes. Una amplia y variada oferta de ocio para todas las edades para la época estival. Los colegios Cervantes y Blasco Ibáñez acogen la escuela de verano municipal que cuenta con la posibilidad de continuar durante el mes de agosto. La edad es entre 4 y 12 años y llevan a cabo numerosas actividades educativas, culturales y lúdicas. En esta ocasión, la escuela de verano que se desarrolla en Blasco Ibáñez alberga 138 niños y niñas y la que tiene lugar en el colegio Cervantes cuenta con 126 asistentes durante el mes de julio.  La piscina cubierta es la sede principal de la Escuela Multideportiva de Verano. Es la oferta más deportiva para los niños de entre 3 y 14 años donde tampoco se descuidan aspectos educativos y clases de inglés. Entre la escuela multideportiva infantil y la de verano participan un total de 210 niños durante el mes de julio.
Las escuelas infantiles municipales también abren sus puertas en verano para los más pequeños. Los centros Verge del Pilar, Mestre Lozano y Els Xiquets, de la mano de sus educadoras, hacen que los niños de entre 1 y 3 años practiquen juegos de agua, manualidades y toda clase de talleres. Los jóvenes algemesinenses con distintas capacidades se reúnen también en la escuela de verano que se lleva a cabo en la sede de Adisalge, ubicada en el centro de la ciudad.
En el colegio Salvador Andrés se lleva a cabo la escuela de verano con comedor a la que asisten en esta ocasión 68 niños. Durante los meses de julio y agosto los asistentes desarrollan actividades lúdicas, deportivas y de repaso escolar.

También desde el OMIC se les enseña a realizar consumos responsables
Además, otra de las concejalías del Ayuntamiento de Algemesí, la de OMIC, también está participando activamente en las escuelas de verano de este año, y lo hace a través de actividades que enseñen a  los más pequeños a realizar consumos responsables.
Para ello, han realizado la lectura de un cuento llamado “La bombilla protestona” que enseña  a los más pequeños cómo llevar a cabo ahorro energético. También se les ha explicado qué es consumir y cómo hacerlo de manera responsable, las tres “R” del buen consumidor (Reducir, Reutilizar y Reciclar) y cuáles son las actitudes que promueven un consumo responsable.
De igual modo también se les explica la importancia de las etiquetas en los productos y se les proporciona una hoja con los símbolos utilizados en las etiquetas para indicar que son mercancías peligrosas, para que los niños se familiaricen con éstas.
Por último, otra de las actividades versa sobre la importancia del ahorro del agua y a través de la asociación ADICAN se les enseñará  a los más pequeños  a ser responsables con los animales domésticos y especialmente a encargarse el cuidado de sus mascotas.