El diputado de Carreteras, Isidro Prieto, acompañado por el alcalde de Villanueva de Castellón, Salvador Álvarez, junto con técnicos de la Diputación de Valencia realizaron una visita a la variante de Villanueva de Castellón, en la CV-560, y posteriormente se procedió a la apertura del tráfico.
Esta carretera constituye uno de los ejes principales de comunicación entre las poblaciones de la comarca de la Ribera Alta. Los aforos de tráfico realizados en la carretera han contabilizado más de 8.000 vehículos diarios, de los cuales alrededor de 500 son vehículos pesados (camiones y autobuses).
La Diputación de Valencia, con una inversión de 3.694.310,93 euros pone en servicio esta variante de Villanueva de Castellón. “Esto supone eliminar el tráfico de paso del interior de la población, especialmente el de vehículos pesados, mejorar la calidad de vida de los vecinos, reducir niveles de contaminación acústica y ambiental y aumentar la competitividad de las empresas de la comarca, reduciendo sensiblemente el tiempo necesario para atravesar la población y por lo tanto abaratando los costes del transporte”, explicó Isidro Prieto.