El último episodio de lluvias en las comarcas de la Costera, la Ribera y la Vall d'Albaida ha sacado a relucir una vez más las carencias de algunos municipios como Ontinyent, Carcaixent, Benifaió o Xàtiva.
En Ontinyent, por ejemplo, las intensas y continuadas precipitaciones, que dejaron más de 120 litros por metro cuadrado durante la tarde-noche del viernes, provocaron que el río Clariano se desbordara y que algunos bajos quedaran inundados. Además, algunos caminos también se quedaron cortados.
Esto provocó la movilización de un amplio dispositivo municipal que actuó en varios sentidos. No solo se colocaron barreras en las vías que quedaron inundadas, como es el caso del Camí Vell de Xàtiva; además, también se tuvo que evacuar el agua de una vivienda inundada en la que vivía una pareja de ancianos.
A estas actuaciones se sumaron otras como por ejemplo, el rescate de un vehículo que se quedó parado a la altura de Mesta en la CV-40, o la retirada de desprendimientos en el barranco de la Bessona. Este último incidente provocó el corte de la circulación en el Camí dels Pressos. Además, las labores de emergencia coordinadas por el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, y por los concejales de Obras y de Seguridad, Manuel Cuesta y José María Hoyos respectivamente, también tuvieron que proceder al corte del suministro eléctrico del colegio de Educación Especial. El objetivo era evitar un cortocircuito en el alumbrado, que se estaba mojando.
Benifaió, en la Ribera, es otro de los municipios que vio cómo las lluvias provocaban, una vez más, que el paso inferior dels Reis Catòlics se volviese a inundar. Esta situación, que se repite cada año con la llegada del primer episodio de lluvias intensas del otoño, se debe, según declaraciones de la alcaldesa, Amparo Arcís, a que llueva «mucho en poco tiempo».  Leer noticia completa en las Provincias