La mosca negra invade la Ribera. La mayor población se encuentra entre Carcaixent y la desembocadura del Júcar

Lunes, 15 de julio de 2013 | e6d.es
• “No pica, muerde”

En lo que llevamos de verano, la picadura de la mosca negra está causando estragos. Los médicos de Algemesí estamos recibiendo una avalancha de visitas a urgencias debidas a las picaduras de este minúsculo insecto. Como muchos de vosotros nos decís, "no pica, muerde". 
La mosca negra es un díptero de entre 3 y 6 milímetros, mucho menor que la mosca doméstica, de color negro y alas blancas. Se cría en zonas de vegetación de las riberas de ríos y riachuelos, donde ponen sus huevos. Para su desarrollo necesita agua corriente, aunque las altas temperaturas acortan la duración de su vida. La mosca hembra pica (muerde) a personas y animales porque necesita la sangre para el desarrollo de los huevos. Es importante aclarar que no transmiten enfermedades.
Realmente estos insectos no pican ni muerden, lo que hacen es cortar la piel con unas finas láminas bucales. Sus picaduras producen una zona inflamada con un punto central rojo. La lesión suele persistir durante una o dos semanas. A diferencia de los mosquitos, esta mosca es diurna, es decir, no pica por las noches. Su mayor actividad es al amanecer y al atardecer y raramente entran en las casas.
De las diferentes especies de mosca negra del género Simulium presentes en los ríos, no todas son agresivas con el hombre. Al igual que en el caso de los mosquitos picadores (Culicidae), son las hembras que se alimentan de sangre para asegurar la puesta de sus huevos. La especie conflictiva se denomina Simulium erythrocephalum y tiene esa predilección. Pertenece a la familia Simuliidae (Diptera). En la actualidad su mayor población se encuentra entre Carcaixent y la desembocadura del río Júcar en Cullera. Consejos y qué hacer ante su picadura. Leer artículo completo en xuquersalut.blospot.com.