Los vecinos de Alzira pueden estar tranquilos porque la construcción de una central térmica requiere muchos permisos y el Ayuntamiento de Alzira todavía no ha tramitado ninguno.
En nuestra comarca ya tuvimos la experiencia de un alcalde del PP que quiso montar una central térmica en Catadau y se encontró con el rechazo final de todos los partidos políticos, organizaciones cívicas y sindicales de nuestra comarca.
Los socialistas alzireños rechazamos cualquier proyecto que pueda ser presentado al Ayuntamiento de Alzira, dado el impacto negativo que supondría la construcción de una instalación que perjudica el medio ambiente y en la salud de los habitantes de la zona, según los informes técnicos elaborados por distintos colectivos y profesionales al respecto.
El impacto ambiental en la emisión de residuos a la atmósfera y los propios procesos de combustión que se producen en las centrales térmicas tienen una incidencia importante sobre el medio ambiente.
En algunos sitios, para tratar de solucionar los daños que estas plantas provocan en el entorno natural, se incorporan a las instalaciones diversos elementos y sistemas, pero el problema de la contaminación es máximo en las centrales termoeléctricas convencionales que usan como combustible la madera. Además, la combustión tiene como consecuencia la emisión de partículas y ácidos que contaminan en gran medida la atmosfera.  Leer noticia completa en elseisdoble.com