Los socialistas alzireños hemos presentado, otra vez, una propuesta para que el Partido Popular hable y todos sepamos qué opina sobre el impago de las ayudas a la vivienda de alzireños que las han solicitado y la Generalitat no se las ha pagado.
En nuestra ciudad existen muchos afectados, ya que se han construido muchas viviendas de VPO, especialmente las conocidas como las del antiguo Cartonajes Suñer. Las más económicas son, en su mayoría, de gente joven de nuestra ciudad.
Son muchos los jóvenes que se han acercado a la sede de los socialistas alzireños para recoger los documentos y poder así presentar las instancias en el PROP e intentar parar la prescripción de las subvenciones que, en su momento, les reconoció la Consellería como un derecho, una ayuda a la vivienda, que no han cobrado desde marzo de 2009.
La deuda que acumula la Generalitat es de 250 millones de euros y, por ello, es necesario que se frene la prescripción de las subvenciones, al mismo tiempo que reivindico que la Generalitat reconozca esta deuda y, sobre todo, que se ponga encima de la mesa un calendario de pagos razonable.
Los socialistas no pararemos de presentar iniciativas en el Ayuntamiento de Alzira y siempre estaremos planteando una acción reivindicativa y de apoyo a los que están siendo afectados hasta que se proceda al pago de las ayudas que se deben.
Mi grupo ha presentado de nuevo la propuesta para que nuestro Ayuntamiento acuerde solicitar a la Generalitat Valenciana el pago de los cheques de acceso a la 1ª vivienda paralizados desde el año 2009 y que el Consistorio alzireño publicite y se pongan los medios oportunos para presentar las reclamaciones del pago de los Cheques Vivienda de los ciudadanos de nuestra población.
Exigiré en el próximo Pleno al Partido Popular de Elena Bastidas que se pronuncie y no siga en silencio como lo hizo en el último Pleno del año pasado. Los políticos estamos para dialogar y debatir todas la propuestas, aunque algunas no las compartamos, por eso se llama democracia. Callar y despreciar el trabajo de la oposición tiene otro nombre muy feo.