._000243
Al igual que ocurrió el pasado mes de agosto, fuentes de la empresa Aigües de Cullera señalaron que no descartan llevar a cabo un nuevo corte de suministro: «Es algo que está sobre la mesa», reconocen, a la vez que son conscientes de que en invierno, cuando apenas vive alrededor de una decena de familias de las 300 que puede llegar a haber en verano, no sería una medida molesta para los vecinos. La comunidad debe unos 165.000 euros a Aigües de Cullera, de los cuales 60.000 corresponden al canon de saneamiento que deberían pagar ellos posteriormente a la Generalitat, por lo que en realidad el impacto de la deuda y los perjuicios se sitúan alrededor de los 100.000 euros.
Leer noticia completa en lasprovincias.es