• El picoteo pocas veces está relacionado con el hambre, muchas veces es una respuesta al estrés o a una situación conflictiva en nuestra vida
Aunque se lleve una dieta equilibrada, comiendo de todo y estando saciado, es muy fácil caer en el picoteo entre horas, que se antoja irresistible en momentos de relajación y aún más con la oferta de aperitivos dulces y saldos de las que disponemos en los supermercados. Chocolate. patatas fritas, chucherías… hacen las delicias del estómago pero es altamente nocivo a largo plazo para nuestra salud.
El picoteo pocas veces está relacionado con el hambre, muchas veces es una respuesta al estrés o a una situación conflictiva en nuestra vida, que muchas veces se resuelve con la comida como consuelo, aumentando aún más la frustración y sin resolver el problema inicial.
Te vamos a dar unas pautas para evitar el picoteo entre horas:
Agua: cada vez que te entre algo de hambre, bebe agua, con lo que conseguirás saciarte y además llegarás a los mínimos de agua al día que los médicos aconsejan tomar.
Chicle: aunque suene infantil, es una forma rápida y sencilla de engañar al estómago. Además la gran variedad de sabores que puedes encontrar podrá hacer que no sea el sustituto ideal, pero por lo menos está bueno.
Fruta: la ventaja de la fruta son sus colores vistosos, que la hacen doblemente apetecible. Puedes elegir los que más te gusten y llevarlos siempre contigo. Es un aperitivo sabroso y sano.
Tortas saciantes: las tortas de arroz son muy saciantes y bajas en calorías y las puedes llevar siempre contigo. Un snack delicioso para cualquier momento.
Reflexiona: cuenta hasta 10 antes de comerte algo entre horas, reflexiona sobre si tienes hambre de verdad o esa ansia responde a otros factores.
Haz más comidas al día: haz desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena, disminuyendo el número de horas entre ellos pero reduciendo la cantidad de comida. Con ello te aseguras de evitar el hambre.
Come sin prisas: cuanto más despacio comas más sensación tendrás de saciamiento y más tardarás en volver a tener hambre.
Fija recompensas: tampoco es que te reprimas todo el tiempo, pues a la larga ello provoca frustración, ponte a la semana pequeñas recompensas, como un dulce.
Esconde las tentaciones: todo entra por los ojos, si quieres evitar tentaciones, esconde todo aquello que te pueda hacer caer o no lo incluyas en la lista de la compra.
Haz lo que te gusta: muchas veces el aburrimiento tiene mucho que ver con el picoteo, viaja con los vuelos baratos de Expedia, sal a bailar con los amigos, apúntate a algo que te guste, comienza a hacer ejercicio…
El picoteo pocas veces está relacionado con el hambre, muchas veces es una respuesta al estrés o a una situación conflictiva en nuestra vida, que muchas veces se resuelve con la comida como consuelo, aumentando aún más la frustración y sin resolver el problema inicial.
Te vamos a dar unas pautas para evitar el picoteo entre horas:
Agua: cada vez que te entre algo de hambre, bebe agua, con lo que conseguirás saciarte y además llegarás a los mínimos de agua al día que los médicos aconsejan tomar.
Chicle: aunque suene infantil, es una forma rápida y sencilla de engañar al estómago. Además la gran variedad de sabores que puedes encontrar podrá hacer que no sea el sustituto ideal, pero por lo menos está bueno.
Fruta: la ventaja de la fruta son sus colores vistosos, que la hacen doblemente apetecible. Puedes elegir los que más te gusten y llevarlos siempre contigo. Es un aperitivo sabroso y sano.
Tortas saciantes: las tortas de arroz son muy saciantes y bajas en calorías y las puedes llevar siempre contigo. Un snack delicioso para cualquier momento.
Reflexiona: cuenta hasta 10 antes de comerte algo entre horas, reflexiona sobre si tienes hambre de verdad o esa ansia responde a otros factores.
Haz más comidas al día: haz desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena, disminuyendo el número de horas entre ellos pero reduciendo la cantidad de comida. Con ello te aseguras de evitar el hambre.
Come sin prisas: cuanto más despacio comas más sensación tendrás de saciamiento y más tardarás en volver a tener hambre.
Fija recompensas: tampoco es que te reprimas todo el tiempo, pues a la larga ello provoca frustración, ponte a la semana pequeñas recompensas, como un dulce.
Esconde las tentaciones: todo entra por los ojos, si quieres evitar tentaciones, esconde todo aquello que te pueda hacer caer o no lo incluyas en la lista de la compra.
Haz lo que te gusta: muchas veces el aburrimiento tiene mucho que ver con el picoteo, viaja con los vuelos baratos de Expedia, sal a bailar con los amigos, apúntate a algo que te guste, comienza a hacer ejercicio…