Bernardo Castillo Vaquero, natural de Algemesí, nombrado valenciano del mes de agosto

Martes, 6 de agosto de 2013 | e6d.es
• Por la Generalitat Valenciana

Bernardo Castillo Vaquero ha sido nombrado valenciano del mes de agosto por la Generalitat de Valencia.
En 1957, nació en Algemesí, localidad valenciana en la que se habían instalado su abuela materna y la madre de Bernardo cuando aún era niña, llegando desde Ciudad Real de donde eran originarias.
En Algemesí se conocieron los padres de Bernardo y cuando éste tenía cinco años emigraron a París acompañados de su hermana pequeña y la abuela materna. En la cosmopolita capital de Francia de inicios de los 60, el padre encontró trabajo en la industria automovilística mientras que la abuela trabajaba como mujer de limpieza.
En un ambiente en el que los oriundos de España se cruzaban con los de Argelia, Marruecos, Italia o Senegal, creció Bernardo que muy pronto, de la mano de sus padres, se convirtió en asiduo a las actividades de Casa Regional Valenciana en París que había sido fundada en 1947.
A pesar de haber crecido en París, su apego a la comunidad valenciana, a su tierra, a su Algemesí, no ha flaqueado nunca, todo lo contrario. Como él decía, “cuando estas lejos, tu tierra te atrae mucho más”. En 1978 hizo su servicio militar en España, donde se le conocía como ‘el francés’. Esta dualidad: ‘francés”, en España; y “español”, en Francia; y el “roce” con los emigrantes españoles acrecentó y consolidó su interés por los problemas de la emigración y por los aspectos sociales.
Profesionalmente ha estado siempre ligado a la administración española. Primero como empleado público y luego como funcionario desde inicios de los años 80. Responsable de Asuntos Judiciales y Sociales en el Consulado General de España en París ha desarrollado una intensa labor en la resolución de los problemas de los españoles en Francia.
Bernardo Castillo Vaquero ha hecho de la labor social su vida profesional y personal. Su trabajo como funcionario público ha tenido en su compromiso asociativo una continuidad que nunca se ha roto. Lo que no podía hacer desde su responsabilidad pública, lo defendía desde su acción asociativa. En este sentido, siempre defendió que los excombatientes de la República cobrasen una pensión y que se reconociese de manera oficial su contribución a la defensa de la democracia en España.
El compromiso de Bernardo Castillo con los españoles –ha ocupado entre otros cargos el de miembro del Consejo Nacional de la Federación de Asociaciones y Centros de Españoles Emigrantes en Francia y ha sido fundador y miembro activo de la Plataforma Mundial por el Derecho de Voto de los Españoles en el Exterior– se ha plasmado especialmente a través de la Casa Regional Valenciana en París (CRV) de la que ha sido pilar fundamental en las última décadas.
En la Casa Regional Valenciana, Bernardo Castillo ha destacado por unas dotes de excelencia en la preparación de paellas y en la organización de los concursos que todos los años la Casa organiza y por su buen hacer en la animación de las fiestas y espectáculos de la entidad sin olvidar su capacidad para llevar a bien las actividades que se le encomendaban en la atención a los socios más mayores. Pero, sobre todo, Bernardo destaca por los proyectos que ha puesto en pie. En los últimos años ha multiplicado sus esfuerzos para que la Casa Valenciana mantenga sus puertas abiertas a todos en unos tiempos en los que la vida asociativa sufre por la falta de recursos y ha trabajado y luchado para que el asociacionismo valenciano en Francia se abra a todos los colectivos.
En este sentido Bernardo Castillo ha desarrollado actividades destinadas a dar apoyo en la sede de la Casa Valenciana a los llamados ‘grupos de palabra’ que reúnen dos veces por semana a aquellos hispanoparlantes que necesitan un apoyo humano y social frente a los problemas que hoy nos inundan. De la misma manera ha abierto un grupo de teatro de improvisación que una vez por semana reúne a una veintena de personas, de todas las edades y orígenes. Ha hecho de esta entidad un lugar de encuentro de numerosos colectivos de jóvenes españoles que han tenido que dejar España para ganarse la vida en Francia. En la sede de la Casa y bajo su dirección, se ven, hablan, comparten y entablan amistad. En su querer profundizar en las relaciones intercomunitarias, Bernardo Castillo ha sido el impulsor del llamado ‘Café Rumano’, el encuentro de una asociación de rumanos emigrantes en Francia con los socios de la Casa y de otros horizontes para aprender a conocerse mejor. Proyectos estos que han tenido una gran acogida y que han logrado traer hasta la asociación valenciana a jóvenes y personas que se han sentido ligadas con el valencianismo gracias a la labor de Bernardo.
Pero Bernardo Castillo es también un hombre de estatura internacional. Elegido representante de los valencianos en Europa ante la Generalitat, en el CEVEX, Bernardo siempre ha impulsado una relación más estrecha entre todos los centros valencianos en Europa: Alemania, Andorra y los 4 que existían en Francia. Su labor ha sido reconocida y por ello desde 2006 es uno de los dos representantes de los valencianos en Europa. En el marco del CEVEX, los otros centros valencianos en el mundo pueden dar cuenta de esta labor infatigable por los valencianos que están fuera de su tierra.  Leer noticia completa en cronicasdelaemigracion.com