Alberic convocará una consulta popular para decidir si asume el gasto de reabrir la piscina

Miércoles, 10 de octubre de 2012 | e6d.es
• Las empresas exigen al ayuntamiento que pague el consumo energético y cifran los costes entre 50.000 y 120.000 euros
La piscina cubierta de Alberic, que permanece cerrada desde hace más de un año, se ha convertido en una pesada losa para el ayuntamiento, que convocará una consulta popular para que sean los vecinos los que decidan si asume el elevado coste de reabrirla en la actual coyuntura de ajustes o mantiene las instalaciones cerradas a la espera de épocas mejores.
La situación en que se encuentra la piscina ha generado un intenso debate en la calle „y también a nivel político ya que son recurrentes en los plenos las preguntas del PSPV„ y las múltiples gestiones que ha realizado el equipo de gobierno con empresas del sector para intentar reabrirla se han encontrado como respuesta con cifras que parecen cada vez más inasumibles. El último presupuesto, sin ir más lejos, se sitúa en torno a los 120.000 euros anuales, por lo que que el gobierno municipal ha decidido celebrar este referéndum para tomar una decisión sobre el futuro de estas instalaciones.
La coalición que encabeza Toño Carratalá considera que reabrir la piscina representa un coste excesivo, como reconoce el propio concejal de Deportes, Bernat Hervàs, pero está dispuesto a hacerlo si en esta consulta popular se cumplen unos mínimos de participación y los vecinos así lo deciden. A falta de regular las bases, todo indica que el referéndum se celebraría antes de acabar el año para poder habilitar la partida correspondiente en los presupuestos municipales de 2013 ya que destinar fondos a la piscina obligará a recortar en otros ámbitos. La piscina cubierta no abriría por tanto hasta la nueva temporada, es decir, septiembre del próximo año.
La empresa que gestionaba la piscina renunció a abrir las instalaciones tras el verano de 2011 alegando que acumulaba un déficit de 250.000 euros y, después de buscar diferentes alternativas e incluso abrir un expediente sancionador por incumplimiento de contrato, el ayuntamiento alcanzó un acuerdo para rescindirlo. Sin embargo, las gestiones realizadas por el gobierno municipal para tratar de reabrir la piscina se han topado con que todas las empresas consultadas ponen como condición inicial que el ayuntamiento asuma el gasto energético de las instalaciones. Esta cifra varía considerablemente en las propuestas recibidas, que sitúan el coste de la piscina entre los 50.000 euros anuales de la más barata y los 120.000 de la más cara.  P.F.  Leer noticia completa en Levante-EMV