Albalat de la Ribera es uno de los pocos municipios con superávit en sus cuentas

Sábado, 16 de marzo de 2013 | e6d.es
• Con un presupuesto de 1’8 millones de euros, el Ayuntamiento de Albalat presume de “pagar a los proveedores cada 15 días”

Las cuentas de 2012 se cerraron con 2,3 millones de superávit, poco más de un millón en remanentes de tesorería. El alcalde de Ontinyent, el socialista Jorge Rodriguez, pretende que los municipios que gastan menos de lo que ingresan puedan destinar el superávit a “inversiones productivas” que generen empleo. Una moción que cuenta, en principio, con el apoyo de todos los grupos del Ayuntamiento, y que se debatirá en el pleno del próximo jueves, insta a las Cortes Españolas a desarrollar la disposición adicional 74 de la ley de Presupuestos del Estado de 2013 para que se modifique la ley orgánica de Estabilidad Presupuestaria de 2012 con el objetivo de que los ayuntamientos puedan destinar el superávit “a la generación de nuevas inversiones” sin verse afectados por el techo de gasto.
Jorge Rodríguez, alcalde de una ciudad de 40.000 habitantes con un presupuesto anual de unos 26 millones de euros, defendió ese mismo criterio el pasado mes de enero en la comisión de Hacienda de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), donde representa a los alcaldes valencianos. “Los ahorros fruto de la buena gestión deben revertir a favor de nuestros vecinos”, sostiene Rodríguez, que preside un equipo de gobierno de izquierdas, integrado por el PSPV-PSOE y Compromís, con apoyo de Esquerra Unida del País Valencià.
“Te obligan a pagar más a los bancos”, se queja el alcalde de Ontinyent, en referencia a la norma de estabilidad que obliga a destinar el superávit a la reducción de la deuda del municipio. “Pero a los bancos ya les pagamos lo que tenemos que pagarles”, añade al destacar que Ontinyent ha reducido de 24’4 a 16 millones la deuda en dos años años. Además, el cálculo del techo de gasto se hace en base a la liquidación del presupuesto, lo que produce que “si has hecho bien los deberes, al año siguiente puedes gastar menos”. Esa regulación, sostiene Rodríguez, alimenta “la tentación de gastar a manos llenas”.
El autor de este texto es Adolf Beltrán. Leer noticia completa y ver hilo de debate en elpais.com.