Agricultura y Medio Ambiente defenderá para 2017 la modificación de la tasa de la potabilizadora

Jueves, 3 de marzo de 2016 | e6d.es
• Se atiende y da respuesta positiva a la petición de los alcaldes de la comarca que afirmaban que no debían asumir un coste por la falta de control por la administración de los acuíferos

El secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro ha anunciado que la conselleria defenderá la supresión en el año 2017 de la parte de amortización de la tasa que la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR) cobra a los municipios de la Ribera conectados a la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP).De esta manera la tasa pasaría a ser de aproximadamente 11 céntimos/m3. 
Así lo ha comunicado Julià Álvaro en una reunión mantenida hoy con los alcaldes de los ayuntamientos de la comarca que toman agua de la ETAP de Alzira, tras comprometerse con ellos en una reunión el pasado 19 de enero a estudiar si era posible realizar una rebaja de la tasa.
A este respecto, Álvaro ha avanzado que deberá contemplarse en los presupuestos de la Generalitat Valenciana para el año 2017 y aprobarse por los grupos parlamentarios de les Corts Valencianes, no obstante, dada la dificultad económica de la Generalitat Valenciana ha añadido que conviene ser prudentes a la hora de plantear los objetivos.
De esta forma se da respuesta a la petición de los alcaldes que consideraban que no debían asumir el coste de amortización de la construcción de las instalaciones de la planta de Alzira y otras infraestructuras para solucionar el problema de contaminación de agua en la comarca.
Además, también se ha revisado la liquidación de 2015 a los ayuntamientos de la Ribera, a petición de los alcaldes, y se pasará a pagar 18 céntimos por metro cúbico en vez de 23 céntimos por metro cúbico. Esto resulta importante porque Hacienda dejará de considerarlo como deuda municipal y desbloqueará pagos que los ayuntamientos tenían pendientes.
No obstante, Julià Álvaro ha trasladado a los munícipes que la tasa de 2016 ya se encuentra establecida y no se puede modificar, por lo que deberá ser abonada.
El secretario autonómico ha señalado que “la situación en la comarca es injusta, porque se obligaba a pagar a sus habitantes por una contaminación de sus acuíferos de la cual no toda la ciudadanía es directamente responsable, sino que va muy ligado a lo que ha habido de inobservancia de controles de contaminación del subsuelo en décadas anteriores”.
En este sentido, Julià Álvaro ha expresado la sensibilidad de la Generalitat Valenciana con este asunto, en el sentido de tener claro que la razón la tienen de su parte los vecinos de la Ribera, pero se ha de hacer un esfuerzo para la recuperación de agua que se pierde a través de las canalizaciones. 
GV