| Edició núm. | Any: 12 | Notícies: | Fotografies: | Comentaris d'usuaris:

 17/09/2018

SECCIONS » Alzira » Articulistes » El bon entenedor » Falles » Opinió » Política

Alzira rinde homenaje a las Fallas y a la Muixeranga con un monumento polivalente de 54.000 €

Criticar los caprichos y despilfarros de Isabel Aguilar no es criticar a las fallas



Una gota de limón | Por: El buen entendedor
 
Ni la emperatriz Aguilar, ni Fernando Pascual (parachoques de Isabel) han hablado de costes cuando han salido a la palestra a hablar de las excelencias del monumento dedicado a los falleros y a las fallas. Igual tienen vergüenza de que se sepa que estas figuras que han ubicado a pie de calle, en la Plaza Mayor, han costado casi de 54.000 euros. Vamos a repetirlo y a ponerlo en negrita: casi 54.000 euros. Es la eterna manía de los políticos de hablar siempre de las excelencias de las cosas y omitir lo que valen. ¿Dónde está esa transparencia de la que siempre hablan?
¿Está mal el monumento? No, me parece una buena obra; a mi modo de ver tan sólo le falta el realismo del vasito de cubata en la mano. ¿Es malo que en una ciudad haya monumentos? No. Lo que ocurre es que este gobierno local no mide bien las prioridades ni la distribución del dinero público. Ni el “Mig any faller” es necesario, ni el monumento es una prioridad. 30.000 euros del ala (más o menos es lo que costó el año pasado), 54.000 euros de la otra ala y 3.000 euros en un viaje a Italia que es una auténtica vergüenza son los últimos caprichos económicos de la “Emperatriz Masagastos”, como ya una vez la bauticé visto el despilfarro continuo en gastos innecesarios de esta concejala.
 
Criticar los caprichos y despilfarros de Isabel Aguilar
no es criticar a las fallas
 
Luis XIV decía ‘el Estado soy yo’, y en el imaginario de Aguilar pensará ‘las fallas soy yo’, quien critica su capricho critica las fallas. Hasta ahí ha llegado su endiosamiento. No nos equivoquemos, criticar este capricho y despilfarro no es criticar las fallas. Por cierto, ¿en qué ha cambiado el mundo fallero local en estos últimos días?
Volvamos a las prioridades, ya que tenemos a sus socios de coalición como son el alcalde y Martínez (EU-Alzira) mirando hacia otro lado. Servicios sociales y las ONG locales deberían ser un primer destino de estos 87.000 euros quemados en juergas, bronce y viajes. Esto se arregla a la hora de distribuir un presupuesto municipal, cuando tenemos el dinero a una parte y los destinos del mismo a la otra. Es tan fácil como aplicar el sentido común y un orden de prioridades. Vamos, lo mismo que harían estos si a la hora de soltar el dinero fuera de sus bolsillos.
 
Isabel Aguilar está convencida de que Alzira es una ciudad turística y cultural.
A años luz de la realidad…
 
Otro de los síndromes de la emperatriz Aguilar es la creencia de que Alzira es una ciudad turística. Las ciudades con tradición comportan una solera y un adecuado comportamiento, tanto de los propios vecinos, como de los que las visitan. Alzira está a años luz de ese sedimento cultural y turístico; nuestra ciudad, por desgracia, está habituada a otras cosas: pintadas en muchas calles que no se limpian, casco histórico en un estado lamentable con abundantes pintadas y meadas, sábanas en las rotondas (ahí lo bordamos con el PP), rótulos colgando todo el año, banderitas colgadas hasta que se pudre la cuerda que las aguanta, pintadas en el suelo que se borran con el paso del tiempo... Y ya lo último que hemos podido ver: gente haciendo una muixeranga en el monumento a los falleros, vandalismo en ese mismo monumento que vio cómo en pocas horas ya le habían roto un pendiente a la fallera. En poco tiempo igual vemos pintada en este monumento la típica “polla alzireña” tan característica en las paredes de nuestra calles. En fin, actos y cosas impensables en Toledo, Ávila, Salamanca, Burgos, Granada… por citar sólo algunas ciudades que sí son turísticas. Allí no iban a permitir este desastre, ni a nadie se le ocurre montarse a caballito en las espaldas de un monumento de Don Quijote. Depende de cómo es una ciudad, en general, repito, en general, así son sus habitantes y los que la visitan. Y de cómo tiene que ser una ciudad, de cómo se deben respetar sus monumentos y del cuidado sus calles tienen buena parte de culpa los que la gobiernan, aunque ellos lo nieguen, que seguro que lo niegan.
José María García dijo en una ocasión: “Soy católico a pesar de la Conferencia Episcopal. Porque la fe no la voy a perder, pero me han quitado la afición”. En mi caso es lo mismo, soy de Alzira y no puedo renunciar a ello, a pesar de nuestros políticos, pero cada vez me da más pena. Os observo.

 
Nota: el autor de este artículo ha preferido ocultar públicamente su identidad. Como sí se ha identificado ante nuestra redacción y el texto guarda las formas y corrección requeridas, lo publicamos y respetamos su libertad de expresión. 

 



El Sis Doble no corregeix els escrits que rep. La reproducció d'aquest text és literal; fidel a les paraules, redacció , ortografia i sentit de l'autor/s
  • 4Comentaris
    Imprimir Enviar a un amic

Notícies similars

AFEGIR UN COMENTARI

Escriu en aquest camp el resultat de la suma, en xifra

És obligatori omplir aquesta casella amb un nick o nom real. No utilitzar la paraula "Anònim" o similars

La direcció no apareixerà públicament però ha de ser correcta; en cas contrari, no se editarà el comentari. Es comprobarà l'autenticitat del e-mail, encara que no se farà públic, seguint la nostra política de privacitat.

* El comentari pot tardar a aparéixer perquè ha de ser moderat per l'administrador. * Ens reservem el dret de no publicar o eliminar els comentaris que considerem de mal gust, il•lícits o contraris a la bona fe; així com els de contingut de caràcter racista, xenòfob, d'apologia al terrorisme o que atempten contra els drets humans. * EL SIS DOBLE no té per què compartir l'opinió de l'usuari, ni es fa responsable de les opinions abocades. * Es recomana no abusar de les majúscules ni d'abreviatures. * Els comentaris han de guardar relació amb el tema del qual tracta la notícia. * No s'admeten comentaris de caràcter publicitari.