Las asesinas de Isabel Carrasco utilizaron como coartada una pastelería que cierra los lunes

Sábado, 24 de mayo de 2014 | e6d.es
• En el momento de su detención afirmaron que estaban en la zona para comprar pasteles, aunque no previeron que ese día el local cerraba por descanso

Las dos principales imputadas por el crimen de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, estuvieron yendo varios días durante la semana anterior al crimen a la misma pastelería, supuestamente con el objetivo de urdir una coartada. Según han informado fuentes de la investigación, María Montserrat González, de 55 años, y su hija, Montserrat Triana Martínez, de 35, fueron a diario al citado establecimiento con las mismas ropas y sobre la hora en la que se cometió el crimen, entre las cinco y la seis de la tarde, donde fueron grabadas por las cámaras de seguridad. Los investigadores consideran que su intención era hacer creer que eran clientas asiduas de esa pastelería y justificar así su presencia en el lugar si alguien las situaba en la zona y si en algún momento llegaban a ser investigadas por la muerte de Carrasco. De hecho, en el momento de su detención afirmaron que estaban en la zona para comprar pasteles, aunque no previeron que ese día, lunes, el establecimiento, ubicado en los aledaños de la Plaza de la Inmaculada de León, cerraba por descanso. Los investigadores consideran que madre e hija pensaban pasar después del crimen por la pastelería con el objetivo de justificar su presencia en la zona ese día. La presidenta de la Diputación de León y del PP provincial murió tras recibir varios disparos el pasado 12 de mayo, cuando caminaba por una pasarela peatonal sobre el río Bernesga en torno a las 17.15 horas. Poco después fueron detenidas María Montserrat González y su hija, a las que la jueza instructora imputa la supuesta autoría de delitos de homicidio, atentado a la autoridad y tenencia ilícita de armas.
Es muy probable que la calificación de homicidio se torne en asesinato según avancen las diligencias, según fuentes jurídicas consultadas por Efe. La detención fue posible gracias a la colaboración de un policía jubilado que fue testigo del crimen y siguió a las sospechosas. La madre se confesó autora de los disparos, lo que ha corroborado la prueba de la parafina. Los investigadores manejan la venganza personal como principal móvil de este crimen, ya que madre e hija responsabilizaban a Isabel Carrasco del despido de la segunda de la Diputación de León en 2011. Además, consideran que ambas mujeres llevaban años alimentando su odio hacía Carrasco, a la que también acusaban de haber impedido a Montserrat Triana desarrollar una carrera política, como era su intención. Leer noticia completa en lavanguardia.com