La reforma del Gobierno deja sin asistencia sanitaria a 2.300 personas cada día

Martes, 24 de septiembre de 2013 | e6d.es
• Algunos médicos de familia están atendiendo a pacientes que se interesan por la caducidad de las recetas para calcular el tiempo que les queda para conseguir el dinero para abonarlas

Los inmigrantes recibieron la exclusión directa, pero las consecuencias de los recortes sanitarios empiezan a ramificarse sobre otros de los colectivos más afectados por la crisis económica: pensionistas, personas con dependientes a su cargo y familias con bajos ingresos comienzan a sentir el abandono del sistema de salud público. Estos se unen así a las 2.300 personas que desde septiembre de 2012 son "desechadas" cada día, según Médicos del Mundo, que hoy arranca un nueva campaña con el objetivo atraer la atención social para recuperar "entre todos" la sanidad universal.
Ya son 873.000 las personas que no pueden acudir a una consulta médica después de la anulación de su tarjeta sanitaria, a lo que se añade las complicaciones derivadas de la caótica aplicación del Real Decreto-Ley 16/2012 que desde hace un año excluye a los inmigrantes de la sanidad pública española. Además, las consecuencias derivadas de otros recortes sanitarios como el establecimiento del copago farmaceútico están debilitando el acceso a un tratamiento correcto de otros sectores de la sociedad.
El 16% de los jubilados no puede completar su tratamiento farmacológico, según la Unión Democrática de Pensionistas. Médicos del Mundo denuncia que cada vez más personas mayores piden ayuda para pagar sus medicamentos. Según explican desde la organización, la preocupación de algunas personas con bajos recursos llega hasta tal punto que "algunos médicos de familia están atendiendo a pacientes que se interesan por la caducidad de las recetas para calcular el tiempo que les queda para conseguir el dinero para abonarlas".
"Hemos comenzado a recibir llamadas de auxilio de personas mayores para hacer frente a los medicamentos que necesitan", lamenta Álvaro González, presidente de Médicos del Mundo quien reconoce que la atención prestada en estos casos por la organización se complica. "El caos administrativo impide poder hacer los cambios necesarios en las tarjetas sanitarias de las personas que lo necesitarían para dejar de pagar el copago, y en la mayoría de los casos la única forma de ayudarles es financiando sus medicamentos. El tratamiento de los enfermos crónicos alcanza costes muy elevados para los que nuestros fondos no son suficientes", reconoce Álvaro González, presidente de la organización. Leer noticia completa en eldiario.es.