El trono de Invernalia está en Teruel
Sábado, 11 de febrero de 2017 | e6d.es
• Sus héroes muertos son el reclamo más real para visitar una tierra en la que la esperanza se viste de medievales leyendas
A 2001 metros se alza el trono de un reino, que muchos dicen que solo es ficción. A caballo entre la fantasía y la realidad, existe un país legendario. Unas tierras inhóspitas y rudas que se extienden a los pies de este pétreo asiento.
Pocos son los valientes que sobreviven en este desierto. El duro clima hace difícil el día a día. La soledad se apropia de estas vastas extensiones. En ocasiones unos valientes, o locos, han intentado sentarse en este trono. La ficción literaria no podría encontrar mejores personajes. No hablo de los Starks ni de los Lanister, esas inmundas estirpes catódicas, no durarían ni un minuto en este duro asiento. Me refiero Al Cid Campeador que desde estas altas cumbres forjó su leyenda. No fue el único. Siglos después llegaría Ramón Cabrera “El tigre del Maestrazgo”.
Pero la historia la tallan los héroes de cada día. Estas figuras históricas, el Cid , Cabrera, son solo las chispas brillantes de esta dura fragua. Durante generaciones se han batido el cobre sus habitantes anónimos. Esos eternos héroes olvidados que aún hoy habitan este reino.
Bajo un candado de hielo, se guarda la memoria del castillo Rojo de Peracense, o de los centenarios árboles, que albergan el alma de dioses antiguos. Los cuervos blancos sobrevuelan este mundo en decadencia. Una extensión gigantescamente inapreciable, escondida en su magnitud desértica.
Sus héroes muertos son el reclamo más real para visitar una tierra en la que la esperanza se viste de medievales leyendas.
En esta era de la meta información, nuestra cultura de masas, no podría encontrar mejor escenario utópico para esta ficción histórica. Mientras las divagaciones frikis, sondean los umbrales de Invernalia, no muy lejos, un reino sin banderas sobrevive al exterminio de la dictadura de los mercados.
Sus hijos huyen, sus templos se derrumban. Quizás un día, en un futuro lejano, la historia y el mito no se puedan separar, y un explorador loco reconozca en este trono el verdadero reino del hielo.
Sergio Solsona
* Sergio Solsona es colaborador de El Seis Doble. Su espacio, aquí.
* Sergio Solsona es autor del blog "Maestrazgo templario".