El Supremo permite a unos padres usar los SMS de su hija para saber quién la mató
Martes, 30 de diciembre de 2014 | e6d.es
• 59 años de cárcel a siete personas por inducción a la prostitución y drogadicción
El Tribunal Supremo ha ratificado la actuación de los padres de la menor Nora Ayala, de 16 años, hallada muerta ante la puerta de su casa en Palma en septiembre 2011, que accedieron y aportaron a la policía los archivos con sus comunicaciones telemáticas, en especial el registro de SMS de su teléfono móvil. La investigación con esos mensajes permitió descubrir que Nora fue víctima junto a otras cuatro chicas de una trama de inducción a la prostitución y a la drogadicción. Los autores fueron condenados a 59 años de prisión por la Audiencia de Palma. Los magistrados piden que se regule "con la máxima urgencia" la intervención de las comunicaciones telemáticas, sobre las que afirma que existe "una laguna". El Supremo da por buena la condena para los siete responsables de la muerte de Nora, integrantes de una mafia de barrio ligada al tráfico de drogas y la explotación sexual de menores y considera a los acusados autores de los delitos por inducción a la prostitución, corrupción de menores y contra la salud pública. Los magistrados asumen el uso legítimo y proporcionado de las copias de los mensajes recibidos y transmitidos por la menor, que no fueron borrados por los padres y "que equivalen a la correspondencia que puede ser conservada por la menor entre sus papeles privados". Los SMS quedan amparados por su derecho constitucional a la intimidad, pero una vez fallecida la receptora o autora no son inmunes al acceso por parte de sus herederos. Los magistrados asumen la valoración de la Audiencia de Palma y rechazan que se vulneraran derechos de la víctima y de su interlocutor porque en los mensajes se identificaba el número de teléfono del traficante condenado. Leer noticia completa en elpais.com.