La aconfesionalidad del Estado también hace agua por el lado de las confesiones minoritarias. El organismo creado por el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero para promover la laicidad y la libertad religiosa, la Fundación Pluralismo y Convivencia, aparece una vez más en unas cuentas estatales elaboradas por el Ejecutivo de Mariano Rajoy. Los Presupuestos Generales del Estado para 2015 contemplan una partida de 1.380.000 euros para sufragar su funcionamiento. Esta cantidad, la misma del pasado ejercicio, aparece encuadrada en el programa "Dirección y Servicios Generales de Justicia", que recibió el visto bueno del exministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón. Pluralismo y Convivencia, constituida por acuerdo del Consejo de Ministros en octubre de 2004, estuvo presidida por los sucesivos titulares de este departamento durante las dos legislaturas socialistas: Juan Fernando López Aguilar, Mariano Fernández Bermejo y Francisco Caamaño. Los drásticos ajustes que acometió el PP a su llegada al poder no supusieron la desaparición de esta fundación, que encontró en Ruiz-Gallardón a un impulsor de su actividad. Hasta el punto que gestionó la cesión por parte de la Administración de una nueva sede a la organización. El inmueble, inaugurado en 2013, estaba adscrito a Patrimonio Nacional. Tras la marcha de Gallardón, su sucesor, Rafael Catalá Polo, ha pasado a ser automáticamente el presidente del patronato. Habrá que ver ahora la implicación del exsecretario de Estado de Infraestructuras en este proyecto, heredado del zapaterismo.
En su memoria de actividades de 2013, Pluralismo y Convivencia recoge las ayudas gestionadas, que recayeron sobre todo en comunidades islámicas y mezquitas (principalmente de Cataluña y Levante), así como en iglesias evangélicas. Las entidades que obtuvieron las mayores asignaciones fueron la Comunidad Musulmana Al Huda (6.200 euros), Centro Islámico de Valencia (6.200), Comunidad Islámica de Montmeló (6.000) y Comunidad Islámica de Valencia (6.000). La Comunidad Musulmana Al Huda, residente en el municipio barcelonés de Mollet del Vallés, fue noticia el pasado septiembre cuando mantuvo un enfrentamiento con el Gobierno municipal (PSC) al elegir como oratorio un local más amplio al habitual en una zona vetada a los centros de culto, según informó El Periódico de Catalunya.
Otra asociación que aparece en la lista de beneficiarias es la Comunidad Musulmana de Terrassa, con un importe de 3.000 euros. Este colectivo salió en defensa del imán Abdeslam Laaroussi cuando en 2012 fue acusado por la Fiscalía de Delitos de Odio y Discriminación de pronunciar discursos que fomentaban la violencia física y psíquica contra la mujer. Los Mossos d'Esquadra le grabaron decir ante 1.500 musulmanes: «Dios dice: '¡Amonestad a aquellas de quienes temáis que se rebelen, dejadlas solas en el lecho, ¡pegadlas!". Otra de las veces, manifestó que ante la desobediencia de la mujer cabe "negarle las relaciones sexuales". La Comunidad Islámica de Terrassa cerró filas con Abdeslam Laaroussi y reivindicó, al mismo tiempo, la igualdad entre sexos, subrayando que el Islam no tolera a quien pueda "perjudicar o discriminar a la mujer". Asimismo, mujeres musulmanas de Tarrasa emitieron un comunicado para recalcar que "en ninguno de dichos sermones se ha vertido comentario negativo alguno contra la mujer y sus derechos, ni en su vertiente civil ni islámica, y por tanto, en ningún momento nos hemos sentido discriminadas o menospreciadas por nuestro imán". Leer noticia completa en vozpopuli.com