Un toro embolado desgarra el brazo a un aficionado en las fiestas de Sollana

Jueves, 22 de agosto de 2013 | e6d.es
• Durante la entrada de mediodía una vaquilla cornea a otro hombre en la boca, que se encuentra «entubado y estable» en el Hospital de la Ribera

«En vivo es lo más desagradable que he visto en mi vida», asegura uno de los asistentes a la plaza de toros de Sollana. Las fiestas de la localidad de la Ribera han vivido dos sobresaltos importantes en apenas 12 horas. El primero de ellos tuvo lugar en la noche del martes al miércoles y causó graves heridas a un hombre, quien incluso podría perder su brazo.
Eran alrededor de las 0.30 horas. Un toro capón de la ganadería de Fernando Machancoses llevaba 20 minutos en la arena después de haber sido embolado sin demasiadas dificultades. Los aficionados habían ido superando el respeto que estos animales, con sus astas en llamas, siempre causan, y más de uno lo había citado.
Cuando parecía que el animal volvería al corral sin mayores consecuencias, un vecino de Almussafes de mediana edad retó al animal y trató de ponerse a salvo en los cadafales. «Le hizo un pase y buscó esconderse en los barrotes. Daba la sensación de que iba engancharlo y entonces tropezó frente al animal», relata a LAS PROVINCIAS un testigo presencial.
Fue en ese momento cuando el astado lo embistió violentamente, lanzándolo contra el cadafal y provocando que las llamas prendieran su cuerpo. Se trató de apenas unos segundos, pero para los allí presentes se hicieron interminables.
Algunas de las personas que se encontraban resguardadas lograron rescatarlo de entre los cuernos del toro, aunque las heridas sufridas ya eran graves. Su brazo derecho fue el que se llevó la peor parte, ya que se enganchó con los hierros de embolar, que están ardiendo.
La Cruz Roja tenía preparado un hospital de campaña con diez voluntarios y una ambulancia. El hombre fue atendido in situ por sus médicos y trasladado al Hospital de la Ribera, indicaron a este periódico fuentes sanitarias. Una vez allí fue intervenido del brazo.
Desde el centro médico informaron de que había sido operado y que no se temía por su vida, puesto que pasó la tarde en planta. Por su parte, Juan Visiedo, de la Penya Bouera de Sollana, explicó que se interesaron por el estado del herido y que el médico les había dicho que había pasado por quirófano en dos ocasiones porque estaban «intentando salvarle el brazo». Asimismo, añadió que el hombre sufría quemaduras en distintas partes del cuerpo «y una herida en la zona del abdomen».
«Todas las fiestas estaban transcurriendo muy bien hasta que pasó este incidente. Con los animales a veces suceden estas cosas», lamentó Visiedo, quien además, afirmó que habían aumentado las medidas de seguridad de los cadafales y se estaban mostrando muy estrictos con la presencia de menores o personas que no estuvieran en condiciones por haber consumido alcohol.  Leer noticia completa en Las Provincias