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 06/11/2014

POBLACIONS » General » Servicis públics

Se reducen al 50% los médicos de guardia nocturna en la Ribera

El Sindicato de Médicos de Asistencia Pública (SIMAP) considera inaceptable que criterios empresariales condicionen la asistencia sanitaria pública


En enero de 2012 la empresa Ribera Salud, gestora de la asistencia sanitaria pública del Departamento 11 de salud - “La Ribera”, tomó la decisión de suprimir el 50 % de los médicos de guardia en seis de los diez centros sanitarios de la comarca dónde se atienden urgencias: Alzira, Benifaio, Algemesí, Carlet, Cullera y Sueca. Desde que se adoptó esta medida, el Sindicato de Médicos de Asistencia Pública (SIMAP) mostró su oposición, solicitando a la dirección soluciones a la inevitable merma asistencial de la medida. La respuesta de la empresa ha sido siempre la misma, una FRÍA exposición estadística de datos, como única justificación del recorte asistencial. En este sentido, la empresa justifica la reducción de personal y en consecuencia de los servicios asistenciales en la aplicación de criterios de eficiencia, pero la realidad es bien distinta ya que el único objetivo es el ahorro de costes con el fin de aumentar el beneficio empresarial.
Transcurridos casi tres años desde que se adoptaron los recortes, SIMAP considera  que la situación es ya insostenible, pues la sobrecarga de trabajo de los médicos que hacen guardias empieza a pasar factura a nivel personal a los facultativos afectados. Al SIMAP han llegado quejas de algunos facultativos que, como consecuencia de las condiciones de trabajo a las que están sometidos, han tenido que someterse a tratamiento ansiolítico o antidepresivo. La presión laboral de los facultativos es máxima, el trabajo que antes se repartía entre dos médicos, ahora lo hace solo uno. Atender a los pacientes que van al centro, acudir a incidencias que se dan en la calle, acudir a visitas domiciliarias y reconocer detenidos si llama la Policía ó Guardia Civil es un cúmulo de trabajo que habitualmente desborda al facultativo de guardia por la noche. Muchas veces la asistencia no es en la misma localidad,  debiéndose realizar desplazamientos de hasta 20 kilómetros para ello.
El Sindicato de Médicos de Asistencia Pública considera que se están dando situaciones límite que ponen en riesgo laboral a los facultativos afectados pues la asistencia de guardias, especialmente las nocturnas, requiere de los médicos un desgaste físico y mental notable para mantener el nivel asistencial que, en realidad, requeriría el doble de personal. El  Comité de Seguridad y Salud ha puesto de manifiesto el problema a la UTE Ribera Salud con la petición de que el Servicio de Prevención y Riesgos laborales tome las medidas oportunas que no pueden ser otras que aumentar la plantilla de médicos de urgencias para, como mínimo, recuperar los niveles asistenciales que existían en 2011.
Las cifras evidencian la magnitud del problema asistencial generado por los recortes de personal en el Departamento de salud de la Ribera. En este sentido, los centros referidos anteriormente sobrepasan las 25.000 urgencias al año por centro, con un aumento promedio en los dos últimos años de alrededor un 8%.
Centros de otras áreas sanitarias de la provincia de Valencia de gestión directa que dan cobertura sanitaria a una ratio similar de ciudadanos y con una presión asistencial de urgencias parecida como Puzol, La Eliana, Pobla de Vallbona, Betera, Godella, Requena, están atendidos por las noches por 2 médicos adjuntos, muchas veces ayudados por un Médico Interno Residente (MIR) En algunos casos como Liria, Paterna, Burjassot, Catarroja, Masamagrell el servicio cuenta con  3 médicos adjuntos.
Esta situación evidencia las carencias asistenciales del modelo Alzira que cubre sus guardias con un 50% menos de personal que aquellos departamentos cuya gestión es directa. La situación es tan grave que ante la falta de personal cualificado, en ocasiones, ha sido un celador quien se ha quedado vigilando un paciente con terapia intravenosa cuando han tenido que salir el médico y la enfermera a una urgencia fuera del centro. Tampoco es inusual que cuando un médico está fuera del centro por motivos asistenciales, tenga que dar instrucciones de tratamiento telefónico para que la enfermera atienda al paciente urgente, aun sin haberlo ni siquiera visto ni explorado.  Aprovechando la jubilación de dos facultativos, uno en Benifaio y otro en Sueca, la empresa Ribera Salud pretende eliminar de la plantilla dos puestos de trabajo lo que propiciará, aun más, la sobrecarga de trabajo del resto de médicos del equipo que tendrán que hacer las consultas médicas que realizaban los médicos que se van a jubilar.
Como dato relevante para comprender la magnitud del problema asistencial cabe destacar que la Conselleria de Sanidad, con el fin de que no exista una sobrecarga de los cupos de pacientes asignados a cada facultativo recomienda 1.500 tarjetas sanitarias por médico, mientras que en el Departamento de salud de la Ribera tienen asignadas más de 1.700 tarjetas sanitarias. Es evidente, que los recortes de personal y la reasignación de tareas más allá de lo que un puesto de trabajo puede soportar, tiene como única finalidad los beneficios empresariales de la concesionaria y no la asistencia sanitaria pública de calidad. Ante esta situación, el Sindicato de Médicos de Atención Sanitaria  SIMAP va a instar al Comisionado para que, de una vez por todas, como responsable de velar por los intereses públicos y del cumplimiento de los pliegos de condiciones suscritos por la concesionaria, adopte, con la mayor urgencia, las medidas que legalmente correspondan.
En opinión del Sindicato de Médicos de Asistencia Pública (SIMAP), con la experiencia existente actualmente en la Comunidad Valenciana en relación al modelo de concesiones privadas (Modelo Alzira); “deberían hacerse públicos, con total trasparencia, los datos que permitiesen realizar una adecuada comparación de ambos modelos de gestión: el público y el privado. Para ello sería necesario que la Conselleria de Sanidad hiciese pública, toda la información sobre diferentes aspectos que afectan a la gestión como ratios de personal, sus retribuciones, el seguimiento de la calidad asistencial, así como el cálculo real de los costes económicos de uno y otro modelo”. Para el SIMAP, “los servicios públicos sanitarios y socio-sanitarios, que jamás debieron ser considerados objeto de negocio, han de ser recuperados de las concesionarias para su gestión pública”.
SIMAP - Sindicato de Médicos de Asistencia Pública
 


 
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