El ‘Mig any faller’ de Alzira… Si quieres conocer a un político dale un sillón

Viernes, 31 de agosto de 2018 | e6d.es
• Los presupuestos y la partida “Gastos diversos de fallas”. ¡Qué sufrida es la palabra “diversos”! ¡Cuánta resignación!


Una gota de limón | Por: El buen entendedor
 
A veces pienso que la sinceridad no es buena; es más, puede traer problemas innecesarios. Sin ir más lejos, si aquí, ahora, yo fuese sincero y escribiese todo lo que opino de los políticos estoy seguro que infringiría algunos artículos del Código Penal. ¿Por qué digo esto? Muy sencillo. Cuando escucho a la emperatriz Aguilar hablar sobre los presupuestos de 2015 (los últimos del PP) diciendo cosas como que “no tiene respuestas a las necesidades de los ciudadanos”, pidiendo que “solucionen necesidades y carencias de la ciudad” o hablando de propuestas que ayuden a familias necesitadas y la creación de empleo… con la mano en el corazón, ¿creen ustedes que yo realmente puedo escribir todo lo que me gustaría? Ni yo ni nadie, a no ser, como he dicho, que vaya contra el Código Penal. Por suerte, de momento, el pensamiento no se puede sentar en el banquillo.
De Isabel Aguilar, portavoz del PSOE en 2015, a Isabel Aguilar, emperatriz del ayuntamiento, pasaron poco más de dos años… ¿cómo se produjo esa mutación? Como diría alguien, si quieres conocer a un político dale un sillón.
Para la Aguilar de 2015 no era una necesidad ni una carencia “que la gente que no es fallera, durante tres días se sienta fallera”; para la Aguilar de 2018 ya hace tiempo que lo viene siendo. Como dije en mi última entrada, esta juerga de 27.000 euros (esto es lo que oficialmente costó el año pasado) simplemente se realiza porque ella tiene el capricho político. No hay otra razón.
Pero no hay que olvidar una cosa, si alguien tiene un capricho y lo consigue es porque hay otro u otros que se lo permiten, en este caso el alcalde. Recordemos cuando se presentaron los presupuestos de 2018 y se dijo que se contempla una posible partida para el ‘Mig any faller’. Evidentemente, esa partida no llevaba ese nombre, pero estaba claro que era para eso. El alcalde lo dice con la ‘boca pequeña’, pero Albert Furió lo dijo bien claro matizando que existía una partida llamada “gastos diversos de fallas”. ¡Qué sufrida es la palabra “diversos”! ¡Cuánta resignación! No hace falta ser un genio para saber a qué iba destinada esa partida. Por lo tanto, una por caprichosa y otro por consentidor son los únicos culpables de este despilfarro… O quizá no. Digo esto porque los partidos del tripartito estando en la oposición defendían una cosa que se llama ‘presupuestos participativos’. Me gustaría lanzar una pregunta a quien esté leyendo ahora este artículo: ¿cuántos de ustedes, que sean ciudadanos de a pie, han participado en la elaboración del actual presupuesto del Ayuntamiento? ¿A cuántos les han llamado o preguntado cómo quieren que se elaboren los presupuestos? A mí no y no conozco a ningún afortunado. Por lo tanto, habría que continuar preguntándose, ¿a quién le han preguntado si quieren que se celebre el ‘Mig any faller’? ¿Qué es eso de ‘presupuestos participativos’? Una mentira que queda muy bien decirla (esto se puede decir, ¿verdad?).
Imaginemos en plan parodia el momento de hacer los presupuestos. La emperatriz dice “pues yo quiero tener un Mig any faller” y el alcalde, casi sudando y con voz temblorosa, diciendo, “tranquila Isabel, le pondremos otro nombre para que no se note” y aquí la emperatriz esboza una sonrisa triunfal.
A todo esto… ¿y la oposición? ¿Qué ha dicho? ¡Ah! Que estamos en agosto, disculpen que se me haya ocurrido pensar que podrían trabajar en mes vacacional por excelencia. Manda cojones que la única formación política que haya dicho algo al respecto sea una formación sin representación municipal, FE de las JONS.
27.000 euros en tres días de juerga inventada e innecesaria por un capricho político… ¿De verdad quieren saber lo que estoy pensando? Yo creo que no hace falta; usted, lector, lo sabe, porque está pensando lo mismo. Os observo.

 
 
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