Los vecinos de la urbanización Faro del Mediterráneo de Cullera hicieron público ayer un comunicado en el que responsabilizaron al ayuntamiento de todos los problemas urbanísticos que arrastra esta zona y que han acabado con el anuncio, por parte de Aigües de Cullera, de que el lunes cortará el suministro del agua potable a unas 300 viviendas por las deudas acumuladas. En un principio, la Cooperativa de Viviendas Faro del Mediterráneo era la única entidad legalmente autorizada para urbanizar y promocionar viviendas. Pero estos propietarios explicaron ayer que, mediante un acuerdo plenario de 1996, el ayuntamiento decidió conceder licencias de obras a empresas para levantar más de 400 viviendas. «Permitiendo y/o favoreciendo la especulación urbanística y el fraude a los consumidores, ya que la múltiples empresas promotoras de dichas viviendas no eran propietarias de la referida obra urbanizadora», denunciaron los vecinos. Leer noticia completa en levamte-emv.com