Una rotonda sin marcas viales
"La rotonda dels llansols" está dejada de la mano de Dios y de las autoridades (in)competentes. Todos sabemos, menos quienes lo deben saber, que las marcas viales tienen por objeto regular la circulación y advertir o guiar a los usuarios de una vía para preservar el orden y la seguridad del tráfico. Pues bien, desde hace bastantes meses -en abril de 2014 ya estaba así (como última referencia segura)-, las marcas viales han desaparecido por el desgaste que supone el tránsito de miles de vehículos a diario y parece ser que a nadie le preocupa.
Si ya resulta difícil para muchos conductores circular por una rotonda, en esta hay que añadir el inconveniente de la ausencia de marcas viales. Es fácil ver como los vehículos circulan sin orden alguno, invadiendo el carril contiguo con el peligro de alcances laterales u otro tipo de accidentes. Incluso, se invade la zona de seguridad que delimita el carril interior con la zona ajardinada del monumento y en la que no se debe circular ni pisar. Se utiliza como un carril más. Claro ejemplo de ello lo tenemos en la foto 1; el coche amarillo está circulando por espacio prohibido. Pero... ¿dónde está la línea continua sobre la calzada que significa que ningún conductor con su vehículo debe atravesarla ni circular sobre ella?
Las autoridades tienen la obligación de conocer esta problemática y reflexionar para buscar una serie de medidas preventivas antes de lamentar cifras de siniestralidad como consecuencia de la falta de marcas viales.

Irresponsabilidad
Ya lo hemos dicho en más de una ocasión, los políticos que nos han tocado viven en una feliz irresponsabilidad y la nómina que les pagamos da la sensación, en ocasiones, de no estar vinculada a la capacidad y buena disposición para desempeñar su tarea. Queremos pedir desde este diario que se empiecen a dar soluciones ya a las irregularidades como la que nos ocupan en este artículo y que, aunque no lo crean, preocupan mucho a los ciudadanos.
Sra. alcaldesa, en este asunto está visto que su equipo de trabajo tiene la llave o la capacidad de presionar a quien corresponda, pero no hay manera de acertar con la cerradura. ¿Seremos nosotros los ingobernables?

EL CONTADOR es una sección para recordar a todos los políticos que tenemos en cuenta
sus palabras, deberes y obligaciones. Vamos a ayudarles a que tengan presente
aquello que un día dijeron o que no solucionan. Por si acaso.