Argentina se impone en el descuento a Arabia Saudí en el COTIF de l’Alcúdia
Sábado, 18 de agosto de 2012 | e6d.es
• El entrenador del Atlético de Madrid Diego “Cholo” Simeone estuvo ayer en Els Arcs para ver a su hijo Giovanni
1 – 0: Gómez m. 29
1 – 1: Asiri m. 51
2 – 1: Ruiz m. 56
2 – 2: Fhadmosaed m. 73
3 – 2: Andrada m. 80
Argentina – Mehring, Magallán, Beloso (Federico m. 41), Kranevitter (Carvallaro m. 55), Giannetti (TA), Fragapone (Simeone m. 51), Ruiz (TA) (Valle m. 73), Villalba, Innocenti (Fernández m. 41), Gómez (Rodríguez m. 51) y Icardi (Andrada m. 41). Entrenador: Marcelo Trobbiani.
Arabia Saudí – Ahmadali, Mohammed, Talalali, Fhadmosaed, Mustafa, Asiri (Salehmohammed m. 59 TA), Kanabah (Kanno m. 80), Alifaraj, Allshehri (Alghamdi m. 66), Alnakhli y Amaarali. Entrenador: Sergio Piernas.
La selección nacional de Argentina se deshizo con más problemas de los esperados de Arabia Saudí en el segundo partido de la jornada, a pesar de no mostrar prácticamente nada del juego que atesoran los pupilos de Marcelo Trobbiani, contagiados por la falta de aportaciones futbolísticas de los asiáticos. Los sudamericanos estuvieron más bien previsibles y se llevaron un buen susto con los dos empates saudís entrada la segunda mitad. Sin embargo, el descuento dejó sin premio a los asiáticos, permitiendo sumar tres puntos a Argentina, líder del grupo junto a Japón.
Acostumbrados los ojos a ver el juego de España, todo parece poco en el fútbol mundial. Argentina salió al campo y dominó el balón pero su juego pareció previsible e impreciso en el primer tercio del encuentro, sin saber cómo superar la maraña defensiva creada por Arabia Saudí que, sin embargo, no rechazó salir con peligro. De hecho, suyos fueron los dos primeros disparos a portería. Los sudamericanos basaron prácticamente todo su juego en Alan Nahuel Ruiz sin que diese nunca la sensación de que eran muy superiores a los asiáticos. A pesar de ello consiguieron adelantarse en el electrónico con una internada de Rodrigo Manuel López que el interior definió de forma individual por debajo del cancerbero Ahmadali.
Los segundos cuarenta minutos siguieron con la misma dinámica que los primeros, con control del esférico por parte de los argentinos y, en demasiadas ocasiones, inocentes llegadas por parte de los saudís. Se mostró rápido e incisivo el autor del gol, Rodrigo Manuel Gómez, por la banda. Ambos conjuntos parecieron aprovecharse más de los deméritos del contrario que de sus propios méritos. Un clamoroso error de Argentina sirvió para que empatara Arabia gracias al tanto de Asiri en el minuto 51. Los delanteros asiáticos demostraron ser la punta de lanza del equipo (lo más destacado junto a sus dos centrales) y rompieron a la zaga albiceleste sobre todo por el medio. Trobbiani no dudó un segundo y tras el gol introdujo al ariete de River Plate Giovanni Simeone. La reacción llegó de inmediato y el mejor del partido, Alan Nahuel Ruiz, deshizo la igualada poco minutos después con un bello tanto desde la frontal.
Por el medio de los centrales volvió a introducirse Fhadmosaed para marcar el segundo tanto de Arabia Saudí en el minuto 73, desatando la total euforia de los asiáticos, pues se encontraron con dos tantos prácticamente sin elaborar juego propio y alimentándose únicamente de los errores de los centrales albicelestes. La definición, eso sí, fue brillante en sus dos goles. Cuando el partido parecía morir en el empate, Andrada se sacó un chut a la media vuelta dentro del área chica de Arabia para desnivelar definitivamente el marcador a favor de Argentina. Era el minuto 80 y los saudís ya habían hecho demasiados esfuerzos como para igualar de nuevo el electrónico.
Árbitros: Francisco Javier Barberá Fuentes, auxiliado en las bandas por Ignacio Martínez García e Iván Ramírez Robles.
Incidencias: Gradas prácticamente llenas. Estuvo en el partido el entrenador del Atlético de Madrid Diego “Cholo” Simeone con el objetivo de ver a su hijo Giovanni.
1 – 1: Asiri m. 51
2 – 1: Ruiz m. 56
2 – 2: Fhadmosaed m. 73
3 – 2: Andrada m. 80
Argentina – Mehring, Magallán, Beloso (Federico m. 41), Kranevitter (Carvallaro m. 55), Giannetti (TA), Fragapone (Simeone m. 51), Ruiz (TA) (Valle m. 73), Villalba, Innocenti (Fernández m. 41), Gómez (Rodríguez m. 51) y Icardi (Andrada m. 41). Entrenador: Marcelo Trobbiani.
Arabia Saudí – Ahmadali, Mohammed, Talalali, Fhadmosaed, Mustafa, Asiri (Salehmohammed m. 59 TA), Kanabah (Kanno m. 80), Alifaraj, Allshehri (Alghamdi m. 66), Alnakhli y Amaarali. Entrenador: Sergio Piernas.
La selección nacional de Argentina se deshizo con más problemas de los esperados de Arabia Saudí en el segundo partido de la jornada, a pesar de no mostrar prácticamente nada del juego que atesoran los pupilos de Marcelo Trobbiani, contagiados por la falta de aportaciones futbolísticas de los asiáticos. Los sudamericanos estuvieron más bien previsibles y se llevaron un buen susto con los dos empates saudís entrada la segunda mitad. Sin embargo, el descuento dejó sin premio a los asiáticos, permitiendo sumar tres puntos a Argentina, líder del grupo junto a Japón.
Acostumbrados los ojos a ver el juego de España, todo parece poco en el fútbol mundial. Argentina salió al campo y dominó el balón pero su juego pareció previsible e impreciso en el primer tercio del encuentro, sin saber cómo superar la maraña defensiva creada por Arabia Saudí que, sin embargo, no rechazó salir con peligro. De hecho, suyos fueron los dos primeros disparos a portería. Los sudamericanos basaron prácticamente todo su juego en Alan Nahuel Ruiz sin que diese nunca la sensación de que eran muy superiores a los asiáticos. A pesar de ello consiguieron adelantarse en el electrónico con una internada de Rodrigo Manuel López que el interior definió de forma individual por debajo del cancerbero Ahmadali.
Los segundos cuarenta minutos siguieron con la misma dinámica que los primeros, con control del esférico por parte de los argentinos y, en demasiadas ocasiones, inocentes llegadas por parte de los saudís. Se mostró rápido e incisivo el autor del gol, Rodrigo Manuel Gómez, por la banda. Ambos conjuntos parecieron aprovecharse más de los deméritos del contrario que de sus propios méritos. Un clamoroso error de Argentina sirvió para que empatara Arabia gracias al tanto de Asiri en el minuto 51. Los delanteros asiáticos demostraron ser la punta de lanza del equipo (lo más destacado junto a sus dos centrales) y rompieron a la zaga albiceleste sobre todo por el medio. Trobbiani no dudó un segundo y tras el gol introdujo al ariete de River Plate Giovanni Simeone. La reacción llegó de inmediato y el mejor del partido, Alan Nahuel Ruiz, deshizo la igualada poco minutos después con un bello tanto desde la frontal.
Por el medio de los centrales volvió a introducirse Fhadmosaed para marcar el segundo tanto de Arabia Saudí en el minuto 73, desatando la total euforia de los asiáticos, pues se encontraron con dos tantos prácticamente sin elaborar juego propio y alimentándose únicamente de los errores de los centrales albicelestes. La definición, eso sí, fue brillante en sus dos goles. Cuando el partido parecía morir en el empate, Andrada se sacó un chut a la media vuelta dentro del área chica de Arabia para desnivelar definitivamente el marcador a favor de Argentina. Era el minuto 80 y los saudís ya habían hecho demasiados esfuerzos como para igualar de nuevo el electrónico.
Árbitros: Francisco Javier Barberá Fuentes, auxiliado en las bandas por Ignacio Martínez García e Iván Ramírez Robles.
Incidencias: Gradas prácticamente llenas. Estuvo en el partido el entrenador del Atlético de Madrid Diego “Cholo” Simeone con el objetivo de ver a su hijo Giovanni.
Carles Senso - Prensa COTIF
Fotos: Álvaro Ruiz
._000159Fotos: Álvaro Ruiz
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